Los diálogos en los que participamos
reflejan nuestros gustos, educación, cultura, forma de ser. Por los diálogos un
buen interlocutor puede descubrir nuestra personalidad.
El diálogo en una narración debe ser
natural, es decir, debe estar acorde con el carácter, el ánimo, la cultura, el
medio y las circunstancias del personaje. Una narración en la que todos los
personajes hablan de forma correcta y elegante, sin serlo, es difícil de creer.
Los campesinos, los citadinos, los obreros, los ejecutivos, cada, grupo tiene
su propia manera de pensar y de hablar. Los diálogos, igualmente, deben ser
significativos. Es decir, deben expresar aspectos esenciales del carácter del
personaje y, al mismo tiempo, importantes para la acción. Si una narración se
empeña en transcribir todos los comentarios distraídos de los personajes se
tornará lenta y aburrida. En los diálogos se emplean guiones largos para marcar
las intervenciones delos personajes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario